El campo magnético terrestre al desnudo

El núcleo interno de la tierra gira rápidamente y en sentido contrario al núcleo externo; además el campo magnético terrestre podría cambiar bruscamente.

Investigadores de la Universidad de Leeds (EEUU), han podido comprobar que el núcleo interno compuesto por hierro sólido gira hacia el este, y más rapidamente, que el núcleo externo compuesto por hierro y niquel fundido que gira hacia el oeste.

Este curioso juego de movimientos entre dos masas de hierro es el responsable del campo magnético terrestre, descubierto en 1692 por Edmund Halley (el mismo descubridor del cometa que lleva ssu nombre)

Los investigadores utilizaron un superordenador situado en Suiza para hacer un modelo del funcionamiento del núcleo, y entre otras conclusiones pudieron comprobar que podrían existir variaciones en el sentido de rotación del núcleo externo. Y en este sentido, el estudio de restos arqueológicos de los últimos 3.000 años han certificado que este cambio de sentido en su giro ocurrió varias las veces en la historia de la humanidad. Para saber más pincha aquí

La variación en el sentido de giro del núcleo externo lleva aparejadas consecuencias claras, el campo magnético podría debilitarse en algunos puntos, o incluso invertirse totalmente como ya ha ocurrido muchas veces en los últimos mil millones de años.

En 2003 y 2004 gracias a satélites especializados, investigadores del Centro Espacial de Dinamarca pudieron observar un debilitamiento en el campo magnético en áreas de Sudafrica o en Asia-Pacífico. Los investigadores en su momento apuntaron que tal vez estuviésemos en las puertas de un cambio brusco del campo magnético terrestre y esto traería un grave problema. Si la radiación cósmica llegara a la superficie terrestre, ésta podría alterar o destruir numerosos componentes eléctricos a su paso (recordemos que es el campo magnético el que nos mantiene "a salvo" de la radiación cósmica. Para saber más. Pincha aquí

Confiemos que el campo magnético se mantenga estable un ratito más, por el bien de nuestra civilización tecnológica...